Una revisión del legado de la directora ejecutiva saliente de CPS, Paula Gold-Williams, revela cómo manejó hábilmente las expectativas de acción climática a través de retrasos y desvíos. Pero con las fechas límite globales críticas que se avecinan, su reemplazo debe hacer de una transición equitativa hacia la energía limpia su máxima prioridad.